Por qué elegir una alimentación Sin Gluten

por-que-elegir-una-alimentacion-sin-gluten

El 27 de mayo es el Día Nacional del Celíaco y para la ocasión hemos elegido entrevistar a la Dra. Bióloga Nutricionista M. Trombetta, que nos ha explicado con detalle las razones para optar por una dieta sin gluten.

A continuación encontrarás las preguntas que le hicimos.

  • Hoy en día, muchas personas eligen una dieta "sin gluten" aunque no tengan intolerancias y/o alergias. ¿Por qué, en su opinión, una dieta sin gluten puede considerarse una opción alimentaria correcta? ¿Qué beneficios e "inconvenientes" conlleva?

Una dieta sin gluten puede ser una buena opción no sólo para los afectados por la enfermedad celíaca, sino también para aquellos que experimentan una condición de sensibilidad al gluten no celíaca (CSNC), que es la condición que los gastroenterólogos de la Sociedad Italiana de Gastroenterología definen como una condición de malestar principalmente de contornos intestinales muy poco definidos. Vamos a explicarlo mejor: quienes padecen la CSNG, aunque no tienen las mismas molestias de la enfermedad celíaca propiamente dicha, tras consumir alimentos elaborados con trigo y otros cereales que contienen gluten, presentan una serie de síntomas gastrointestinales o incluso dolor de cabeza, dificultad de concentración y similares.

La dieta sin gluten puede ser un gran avance para cualquier persona que experimente molestias tras consumir alimentos que contengan gluten pero que no haya sido diagnosticada de enfermedad celíaca.

Sin embargo, la dieta clásica sin gluten nos obliga a hacernos algunas preguntas, porque a menudo los alimentos utilizados tienen un índice y una carga glucémica elevados, es decir, tienen un mayor impacto en la respuesta de la insulina del organismo que los productos de panadería tradicionales.

  • Hablemos de los ingredientes: Avena, teff y trigo sarraceno. ¿Por qué preferir estos cereales a los clásicos "maíz y arroz"?

El maíz y el arroz son los cereales más utilizados en la producción de alimentos sin gluten, no por ninguna propiedad beneficiosa en particular, sino más bien por sus propiedades tecnológicas. Por ejemplo, el maíz, que contiene mucho almidón ceroso, es capaz de simular la presencia de gluten, haciendo que la masa sea más manejable.

Sin embargo, el efecto que este tipo de alimentos tiene sobre nuestro nivel de azúcar en la sangre es devastador. Los alimentos clásicos "sin gluten", basados en mezclas de arroz y maíz, han demostrado ser a menudo la causa de un aumento de peso incontrolado en los sujetos que los consumían y también están correlacionados con la aparición de enfermedades como la diabetes.

Esto se debe a que carecen de fibra y minerales como el potasio o el zinc y tienen un mayor contenido de azúcares y grasas libres. Además, tienen un alto índice glucémico, que estimula la respuesta de la insulina de nuestras células.

En cambio, el uso de cereales "antiguos" como la avena o de pseudocereales como el teff y el trigo sarraceno en los productos de panadería nos permite disponer de alimentos innovadores sin gluten, ricos en fibra y con un índice glucémico bajo, incluso inferior al de los productos de panadería a base de trigo. Esto significa que los alimentos a base de estos cereales disminuyen la absorción de azúcar en la sangre (glucemia) y ralentizan el vaciado gástrico, es decir, prolongan la sensación de saciedad.

Además, el alto contenido en fibra de estos cereales permite a quienes los consumen tener un mejor control del peso y mejorar todo el proceso digestivo.

  • ¿Tiene algún consejo para quienes siguen este tipo de dieta? Ya sea por elección o por necesidad.

Ahora está claro que quienes siguen una dieta sin gluten no pueden ignorar el efecto que los alimentos que consumen tendrán en su cuerpo.

En primer lugar, es bueno identificar los alimentos que tienen un índice glucémico bajo, como los que se basan en los cereales antiguos y los pseudocereales, que tienen un contenido en fibra como para estimular al organismo a regular la sensación de saciedad y la respuesta a la insulina.

En este sentido, los productos de avena, teff y trigo sarraceno son alimentos clave para combinar el sabor con la funcionalidad.

Además, las personas que siguen esta dieta pueden sufrir desequilibrios nutricionales debido a la escasa ingesta de fibra y vitaminas, por lo que es fundamental enriquecer su dieta con frutas, verduras y legumbres. En particular, en lo que respecta a la fruta, deben preferirse los frutos rojos, ricos en antioxidantes y fibra, y entre las verduras, las Brassicaceae (como el brócoli o la col) u otras verduras ricas en fibra, como el hinojo o las alcachofas. Una buena opción para aumentar la fibra en tu dieta es también utilizar la pasta de legumbres, que es similar a la pasta tradicional en sus usos culinarios pero mucho más rica en fibra.

  • Los que tienen que seguir este tipo de dieta sienten que tienen que renunciar a muchos platos sabrosos y deliciosos... Pero, ¿es posible comer "normalmente" sin gluten?

¡Claro que sí! Hoy en día es posible seguir una dieta sin gluten sin ningún sacrificio. Y es que cada vez hay más productos que no sólo tienen en cuenta la necesidad de seguir una dieta sin gluten, sino que se centran en el bienestar nutricional de quienes los consumen, desde el desayuno hasta la cena.

Por ejemplo, un día típico podría establecerse de la siguiente manera:

DESAYUNO: Bebida vegetal a base de avena + Ciuffetti De Trigo Sarraceno Al Coco + chocolate negro 70%.

SNACK: Barrita de nueces de Brasil orgánicas con crujiente púrpura + prensa de naranja

ALMUERZO: Penne de trigo sarraceno con brócoli y anchoas

SNACK: Pan crujiente con semillas de sésamo y chía + una fruta

CENA: Piadina de quinua + jamón crudo + rúcula + Grana Padano /

Alternativa vegana: relleno de piadina: crema de aguacate, tomates frescos, rúcula o calabacín a la plancha, humus de garbanzos y tomates secos (Sottolestelle).

  • Una pregunta difícil... ¿Puedes recomendar una receta sencilla, sana, ligera y sin gluten?

Sí, claro... Aquí tienes una receta veraniega, ligera y equilibrada... y sin gluten, por supuesto. Fusilli de lentejas rojas con atún y calabacines fritos

 

FUSILLI DE LENTEJAS ROJAS CON ATÚN Y CALABACÍN

Para 1 persona

  • 60 g de fusilli con 100% de lentejas rojas
  • 150 g de atún (fresco o en lata, natural)
  • Calabacines
  • Perejil, aceite y ajo al gusto

En una sartén antiadherente poner un poco de aceite, regar y añadir el atún troceado, más los aromas elegidos y los calabacines lavados y cortados en rodajas. Dejar aromatizar durante unos 5 minutos, removiendo bien.

Cocer los fusilli 100% lentejas rojas en agua hirviendo respetando el tiempo de cocción, escurrirlos y aliñarlos con un chorrito de aceite. A continuación, añadir los fusilli con atún y calabacín, meterlos en la sartén y ¡sírvelos!

Alternativa vegana:

Receta para 5 personas

  • 240g de fusilli con 100% de lentejas rojas
  • 500g de espinacas
  • 500g de setas
  • 50g de piñones
  • 2 dientes de ajo
  • aceite de oliva virgen extra
  • sal al gusto

En primer lugar, tostar los piñones en una sartén pequeña hasta que estén ligeramente dorados, y resérvalos. Mientras tanto, limpiar las setas con un paño húmedo y retirar los extremos de los tallos. Cortar en rodajas y saltear en una sartén con un poco de aceite y un diente de ajo, manteniendo el fuego alto para que se doren. Una vez cocido, apagar el fuego y sazonar con sal, pimienta y perejil.

En otra sartén, saltear las espinacas con una gota de aceite y una pizca de sal el tiempo suficiente para que se marchiten y las añadimos a las setas. Cocer los fusilli en abundante agua con sal durante el tiempo indicado en el envase. Una vez cocidos, añadirlos a las verduras y saltearlos durante un minuto aproximadamente, para que se mezclen bien los sabores. Antes de servir, añadir un puñado de piñones tostados.